El 8 de marzo del 2025 se casaron en Pichilemu la Ceci con Tomás Santa Cruz. Una ceremonia religiosa muy bonita en el que ofició el Padre Mariano Irureta en una iglesia repleta pero muy íntima. La Misa y el matrimonio fueron a las 12.30 hrs. De ahí, nos dirigimos al Hotel Alaia para celebrar con todos los amigos de la Ceci y los parientes invitados. Para mí fue muy emocionante todo el día. Desde el despertar y desayunar con la Ceci, esperar que se maquillara, peinara y vistiera, hasta acompañarla en el auto a la Iglesia. Fueron momentos muy bonitos, la Ceci estaba linda, alegre y se la notaba con mucha ilusión. El día anterior había estado trabajando intensamente en todos los detalles de la fiesta. En los arreglos florales, en la coordinación de la entrega de todas las tortas y postres que venían de Santiago, en revisar que no faltara nada para el día siguiente. De hecho, me encargó que el sábado mismo a primera hora fuera a la feria a comprar toda la fruta que faltaba y que se complementaría con los manjares que se ofrecerían.
En el camino a la Iglesia, nos fuimos en el auto escuchando "Imagine" de los Beatles, sacándonos selfies y conversando animadamente.
Cuando llegamos a la Iglesia, tuvimos que esperar un rato, porque el novio y los padrinos no entraban, como corresponde para que sea la novia la que entre con su papá bastante más atrás. Ya estábamos frente a la Iglesia estacionados y pese a todos los llamados a que entrara el novio, éste en un momento se acercó al auto a ver a su novia. La Ceci se emocionó y echó unos lagrimones que me hicieron emocionarme a mí también.
En la fiesta, los novios al llegar dijeron algunas palabras cada uno, y la Ceeci leyó lo siguiente:
"Quisiera solo dar palabras de agradecimiento. En primer lugar a Dios y a mis papás Jaime y Angélica, y a los papás de Tomás Samuel y Pilar por hacer esto posible, por su gran generosidad, dedicación y paciencia con nosotros. Generosidad por siempre estar, siempre acoger y entregarse con tanto cariño. Por su dedicación a nosotros, todo el tiempo dedicado a criarnos con tanto amor y que gracias a ese amor hoy somos lo que somos. El ejemplo de ustedes nos inspira a ser buenas personas, buenos ciudadanos y buen matrimonio, a trabajar duro, a ser muy perseverantes, conscientes de que no es un camino fácil pero a la vez muy feliz. Gracias por la fe con la que a los dos nos formaron, herramienta indispensable para empezar este nuevo camino juntos. Gracias por los hermanos que nos dieron, nuestros eternos amigos, que tanto nos enseñan y que son nuestra escuela de verdadera amistad, amor y perdón.
Gracias a ustedes, nuestros primos, tíos y amigos que nos han acompañado, estamos muy conscientes del gran esfuerzo que cada uno de ustedes hizo por venir hoy, desde Santiago, Puerto Varas e incluso los que vinieron desde Buenos Aires especialmente, no saben lo felices que estamos y lo afortunados que somos por compartir este momento tan único e importante de nuestras vidas, será un hito entrañable que quedará para siempre en nuestro corazón.
Salud!"
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Brindando con los invitados |
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La familia Bazán Ried |
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