Viernes 11 de octubre de 2024, día 5
Puerto Ramírez
Iniciamos nuestro viaje a Puerto Ramírez con un día nublado, a ratos lloviendo, y con 10º de temperatura. Muy agradable para viajar. La parte de tierra del camino que va de Caleta Gonzalo a Chaitén, es relativamente buena, aunque siempre en el ripio hay que andar con precaución. Lo bueno de aquel día, en todo caso, es que por la lluvia no se levanta polvo en el recorrido. El viaje hasta Puerto Ramírez son solo 140 kms. que debieran hacerse en unas 2 hrs. Sin embargo nuestra idea es parar en algunos puntos que nos han recomendado visitar: La playa de Santa Bárbara, que está a unos 10 kms. antes de Chaitén, en Chaitén, su museo, luego el parque Amarillo, que también es parte de Pumalín y que se llama así por pasar por allí el río Amarillo.
Nuestra primera parada, entonces fue en la Playa Santa Bárbara, una caleta con una playa muy linda, encerrada y prácticamente sin construcciones a la vista. Como estaba lloviendo, no nos bajamos del auto, pero valió la pena conocer ese lugar remoto donde apenas se veían algunos pescadores que tenían sus botes sobre la playa.
Luego seguimos a Chaitén, pueblo que fue arrasado por el Volcán Chaitén el 2008 y cuyos habitantes tuvieron que ser evacuados. Ahora, 16 años después, está reconstruído y es la puerta de entrada a la Carretera Austral para todos los que llegan directamente desde el continente o de la isla de Chiloé. En Chaitén hay una estación de bencina Copec, donde aprovechamos a llenar el estanque, nos recomendaron siempre andar con el estanque lleno por no haber muchas estaciones de bencina en la zona. Luego nos dirigimos al museo de Chaitén para conocer detalles de esa terrible tragedia ocurrida el 2008. Pese a que en la entrada del museo había un letrero que indicaba los horarios de apertura para el público (de martes a domingo de 10 a 12 pm y de 15 a 17 hrs.) y a que eran las 11:24 hrs., el museo estaba cerrado y no se veía a nadie por los alrededores, no pudimos entrar y nos quedamos con la visita pendiente para otra vez.
|
Chaitén y su museo cerrado en horas de visita. Un entorno muy conmovedor por la tragedia vivida
|
Luego continuamos hacia otra parte del Parque Pumalín, el sector El Amarillo, para hacer el sendero "Las ranitas de Darwin". Este es un sendero de 2,8 kms. relativamente fácil de recorrer. Está muy bien señalizado y en gran parte del recorrido da la sensación de estar caminando sobre una especie de asfalto blando. Probablemente le pusieron algún material para paliar el efecto de la lluvia sobre el sendero. Es un circuito que permite adentrarse en un frondoso bosque, también apoyado por pasarelas de madera, puentes y escaleras de troncos.
|
Sendero la Ranita de Darwin: belleza del sur de Chile en su máxima expresión! |
El recorrido lo hicimos en 1:15 hrs. bajo un cielo amenazante de lluvia que no llegó a concretarse. Muy recomendable!
Luego continuamos nuestro viaje hacia Puerto Ramírez, donde alojaríamos en "Las cabañas The Fishing Lodge". El camino es pavimentado y seguro, pese a que no es recomendable superar los 80 kms. por hora. Tiene muchas curvas y pendientes pero está muy bien señalizado. Cuántos miles de millones de árboles uno puede ver en esos bosques milenarios que rodean el camino y que lo van conduciendo por distintos parajes. El verde es incontenible!
Sin embargo, en forma repentina, y poco antes de llegar a la bifurcación del camino que nos llevaría a Puerto Ramírez, nos enfrentamos a un panorama desolador, desértico, ningún arbol alrededor, puras piedras y troncos por todos lados. Son las consecuencias de una gran aluvión ocurrido en diciembre de 2017, que arrasó con la Villa Santa Lucía y dejó un saldo de 21 personas fallecidas. Dramático, en esas lejanías y soledades, encontrarse con este pueblito que muestra desde el camino los efectos sufridos en varias de sus casas que al día de hoy permanecen semienterradas dando testimonio de la potencia con que los desastres naturales actúan y que escapan de todo control humano.
Continuamos el viaje, pese a nuestra emoción y conmoción de ver tamaña tragedia.
A pocos kilómetros de Santa Lucía, avistamos nuevamente el lago Yelcho, cuyo lado norte habíamos anteriormente divisado saliendo de Chaitén.
Al lodge llegamos alrededor de las 18 hrs., donde nos esperaban Elisa y Benjamín en las "Cabañas The Fishing Lodge", una casa muy acogedora con piezas amplias y bien calefaccionadas.
|
Las Cabañas the Fishing Lodge en Puerto Ramírez |
Después de instalarnos en nuestra habitación, bajamos para comer algo que nos tenía preparado Elisa y nos acostamos temprano pues ya el cansancio de la jornada comenzaba a notarse.
Sábado 12 de octubre de 2024, día 6
Puerto Ramírez
Amanecimos con un buen desayuno y partimos a Futaleufú, a 60 kms. aproximadamente y 1 hora de viaje. El camino pavimentado muy bueno y bien señalizado, volvió a sorprendernos mostrándonos nuevas maravillas, pese a que pensábamos que ya nada podría sorprendernos. Muy lindo todo el entorno y en la medida que nos acercábamos a Futaleufú, más paisajes espectaculares veíamos.
Al entrar a la comuna de Futaleufu, un letrero nos da la bienvenida "Futaleufú, un paisaje pintado por Dios". Parece un milagro, todo es armónico, los colores, el cielo, las nubes, los campos, los bosques, la ciudad ordenada, tranquila, los potreros, los animales pastando. No queda más que agradecer a Dios lo que nos ha mandado y que nos compromete a cuidarlo.
La noche anterior conversando con Elisa, nos contó que al otro lado de la frontera, en Argentina (Futaleufú está a 15 minutos de la aduana), había un campo en Trevelín que cultivaba tulipanes y que estaban en plena época de florecimiento. Como ha sido el gran sueño de la Francisca ver este fenómeno, decidimos hacer el paseo y cruzar la frontera para ir a ver los tulipanes. Para ello reservamos un Uber que nos esperaba en la plaza de Futaleufú y que nos llevaría a los tulipanes! (nosotros, en auto arrendado, no podíamos hacerlo).
Alicia nos llevaría a ver esta explosión de coloridos campos de tulipanes!
Sin embargo, cuando llegamos a la frontera, los turistas argentinos que hacían cola para ingresar a Chile, nos contaron que debido a que el invierno fue muy crudo, los tulipanes todavía no florecían, que se habían retrasado unos cuantos días.
|
En la aduana argentina dispuestos a visitar los campos de tulipanes florecidos |
Igual aprovechamos que ya estando en el lado argentino y a pocos kms. de "La Yesca", un pueblo donde Alicia tenía un conocido que la abastecía de varios productos que en Chile eran más caros, para acompañarla a llenar el estanque de bencina. Fue un paseo simpático, pese a que eran pocos kms. de camino de tierra.
|
Una postal de "La Yesca" |
Después de este paseo matinal, nos fuimos a almorzar a un restaurant italiano en Futaleufú que nos recomendaron mucho. "La Antigua Casona", que además es un hotel. Lamentablemente ese día los dueños no estaban y el restaurant en teoría estaba cerrado. No obstante, habían unos argentinos comiendo como una excepción y nosotros le pedimos a la que atendía, una señora muy simpática, que también hiciera una excepción con nosotros. Así almorzamos allí. Un local con mucho ambiente y buenas vibras.
|
Tomando una cerveza local en "La antigua casona" en Futaleufu |
Después de almuerzo, nos fuimos a recorrer los alrededores de Futa, como le dicen los lugareños, y hacer algunos senderos que nos recomendaron.
Primero que nada, fotografiarnos en el río Futaleufú, muy adecuado para hacer rafting, el mismo que no hicimos, pero que impresiona por el color de sus aguas, la fuerza con que corre y el ruido que produce su paso por los acantilados y rocas.
Hicimos dos senderos relativamente fáciles y con el objetivo de mirar el río Futaleufú desde distintos ángulos. Los senderos, "El cañón del Diablo" y el, "Mirador de los Reyes" nos muestran distintas perspectivas del río que vemos correr desde una gran altura.
Futaleufu, un paisaje pintado por Dios, como dice su lema, con su luminosidad única, y su gente tan amable, amistosa y dispuesta a ayudar, nos recuerda aquellas palabras de San Lucas:
"Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará el sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tinieblas,
y en sombra misma del mal,
para guiar nuestros pasos
por el camino de la paz".
Lc.1, 79.
Porque no es más que paz lo que se respira en estas lejanas y solitarias tierras, con gente tan buena y que no ha sido alcanzada por la maldad que abunda en las grandes ciudades. Gente que ha escapado de ese mundo contaminado y que en estas soledades ha logrado en esa tranquilidad, encontrar la felicidad y paz interior que llena el alma.
|
Futaleufu: Paisaje pintado por Dios |
Después de ver estas maravillas, emprendimos la vuelta a nuestro Lodge en Puerto Ramírez, despidiéndonos de Futa y con muchas ganas de quedarnos a vivir en este lugar de ensueño.