miércoles, agosto 03, 2005

ESTADOS UNIDOS Y SU INSTITUCIONALIDAD DEMOCRATICA

Para que la democracia funcione no solamente es necesario creer en el sistema, sino que también cuidarlo, respetarlo y quererlo.
Hace algunos días tuve la oportunidad de visitar Washington, la capital de EEUU. Es una ciudad templo de la democracia. Allí se veneran a los padres de la patria que predicaron la igualdad de oportunidades y que lucharon para hacerla realidad. Los grandes monumentos son el recuerdo de aquellos que incluso dieron su vida por un ideal superior. Hombres como Washington, Jefferson, Lincoln, Roosevelt, son recordados con los mensajes más importantes de su vida pública.
Los estadounidenses que tienen la oportunidad de visitar su capital, viven permanentemente el mensaje y el legado de los fundadores de esa nación. Allí los símbolos se respetan y sus mensajes se practican. Los flagelos y las pérdidas humanas que la nación ha sufrido, también son objeto de recuerdo y homenaje. Allí están los memoriales de las distintas guerras en que ha participado Estados Unidos. Un agradecimiento a los hombres que han dado su vida por su país.
También están presentes en todo momento sus instituciones, el Capitolio, que acoge al Congreso de EEUU, la Casa Blanca, donde vive y trabaja el Presidente de EEUU, la Corte Suprema. La Biblioteca del Congreso también es otra de las instituciones que se admiran por haber sido capaz de juntar la colección de libros más importante del mundo. Y para qué decir del Mall que agrupa a importantes museos que no solamente muestran la historia exitosa de EEUU, sino que también acoge a importantes obras de arte de todo el universo.
Sin duda que Estados Unidos, país que sólo es 34 años más antiguo que Chile, ha sabido recoger lo mejor de su pasado y conservar las tradiciones que le han dado consistencia, carácter y orgullo a su pueblo.
Si lo contrastamos con Chile, que nació con divisiones odiosas entre o'higginistas y carrerinos, con varias constituciones en el cuerpo y con dudas hasta el día de hoy de que nuestro lema patrio sea el adecuado, podríamos concluir el por qué de la fortaleza en uno y la falta de identidad en el otro.

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