La tienda Falabella, que está a punto de abrir en el Portal, ha decidido promover este acontecimiento poniendo avisos publicitarios en cuanta esquina es posible. Lamentable la decisión de la Municipalidad de permitir esta contaminación visual en un barrio que es por esencia residencial. El diario
El Mercurio publica hoy una carta de Alexander Galetovic que comparto plenamente.
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