Raúl Bazán Dávila fue un abogado que enfrentó difíciles momentos de nuestra política exterior cuando las críticas internacionales al reciente gobierno militar arreciaban con fuerza.
Como embajador del país en el organismo mundial alzó su voz en la asamblea de las Naciones Unidas para dar a conocer las razones de la intervención militar en 1973, protagonizando un violento incidente con el canciller de Cuba, Raúl Roa, que causó impacto en la opinión pública mundial.
La defensa del régimen militar la hizo hasta en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, para lo cual utilizó la experiencia y conocimientos diplomáticos que había adquirido a través de los distintos cargos que por espacio de casi treinta años sirvió en el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Había nacido en Santiago en 1913, estudió en el Colegio de los Padres Franceses y después Derecho en la Universidad Católica, obteniendo su título de abogado en 1946 tras la aprobación, con distinción máxima, de su tesis, la que incluso fue premiada por el propio Colegio de Abogados.
Como profesional, fue Fiscal de la Caja Nacional de Ahorros y del Banco del Estado.
Su interés por la cosa pública lo hizo participar en algunas publicaciones como las revistas "Estanquero" y "Hoy", y en calidad de asesor literario de "Ercilla". Fue también presidente del Instituto Chileno de Cultura Hispánica.
En 1954 se incorporó a la carrera diplomática, siendo por 8 años embajador de Chile en Brasil bajo los gobiernos de Carlos Ibáñez y Jorge Alessandri. Su permanencia en el Ministerio de Relaciones Exteriores culminó en 1976, cuando se aceptó su renuncia voluntaria después de haberse desempeñado también como ministro consejero y asesor político de la Cancillería, en la embajada de Chile en España y servir como representante del país en las Naciones Unidas.
Enviado por el Presidente Pinochet, recorrió las cancillerías de Europa Occidental para explicar el problema de los derechos humanos. A pesar de haber renunciado a sus funciones oficiales, siempre se mantuvo alerta en la defensa de la soberanía nacional, razón por la cual intervino con pasión en el tema del canal Beagle y de las islas chilenas Picton, Lennox y Nueva, opinando críticamente sobre el manejo de la situación.
En 1987, el Instituto de Investigaciones del Patrimonio Territorial de Chile de la Universidad de Santiago editó su obra "El Patrimonio Territorial que recibimos del Reino de Chile".
Casado con María Isabel Ried Carrera, tuvo seis hijos.
El Mercurio, 12 de agosto de 2007
No hay comentarios.:
Publicar un comentario